Ha llegado el momento de desmontar los mitos de la falsa economía colaborativa que amenaza los destinos turísticos y la competitividad de las empresas turísticas
El sector turístico reclama la actualización del marco normativo regulador del turismo
La ordenación y regulación de la actividad turística, debe ser capaz de anticipar la amenaza de la turismofobia ciudadana
Madrid, 19 de julio de 2017. La Unión Empresarial por la Promoción Turística de Madrid, con la colaboración del Banco Sabadell, ha llevado a cabo la Jornada Técnica: “La falsa economía colaborativa y la problemática de la regulación de la actividad turística”, en el Ilustre Colegio Central de Titulados Mercantiles y Empresariales de Madrid. Esta jornada forma parte del ciclo de sesiones de trabajo planificadas por La Unión: “CONSTRUYENDO EL FUTURO DEL TURISMO DE MADRID”, y que pretende contribuir a enriquecer el debate técnico y sectorial sobre las principales prioridades del sector turístico en Madrid.
Respecto al contenido de la jornada, “La falsa economía colaborativa y la problemática de la regulación de la actividad turística”, su objetivo ha sido analizar globalmente el nuevo escenario al que se enfrenta la actividad turística, y la economía de mercado y el estado del bienestar en general, como consecuencia de la irrupción de nuevos modelos de negocio supuestamente colaborativos sobre los que ha llegado el momento de reflexionar con rigor, desmontando muchos de sus mitos y denunciando los espacios de impunidad, intrusismo, y competencia desleal en lo que se refiere a su impacto económico pero que tienen una incidencia directa sobre la degradación del estado del bienestar, las condiciones de calidad de vida en las ciudades, y las garantías sobre los consumidores.
Itziar Marín, de CECU; Cassio Paz, de CCOO; César Galiano, de UGT; Dionisio Lara, de La Unión; Emilio Gallego, de la FEHR; Enrique Villalobos, de la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid.
Una situación que horrorizaría a los padres del comercio justo y la economía compartida, que tuvo su origen en el entorno contracultural de los años 60, y que asistirían escandalizados a la torticera manipulación de los postulados de una economía idealista y solidaria frente a la voracidad del capitalismo más salvaje.
El glamur de las nuevas tecnologías nos ha deslumbrado a todos, incluso a la administración, pero ha llegado el momento de reaccionar porque la pasión por las nuevas tecnologías y la economía digital, podría arrastrarnos a un proceso de desregulación y de radical liberalización de consecuencias imprevisibles en estos momentos, y que ya tiene un negativo impacto directo sobre la fiscalidad, los derechos laborales, la seguridad jurídica de los permisos y licencias de la Administración, las garantías al consumidor, la protección a la población residente, etc.
En este contexto, la especial relevancia de la jornada organizada por La Unión Empresarial por la Promoción Turística de Madrid, radica en que ha permitido reunir en un mismo foro a la administración local y autonómica, junto con los agentes económicos y sociales: asociaciones empresariales, organizaciones sindicales, movimiento vecinal, consumidores, etc., y que debería permitir poner en marcha una profunda reflexión sobre el MODELO TURÍSTICO que queremos para Madrid y al mismo tiempo, reclamar los recursos humanos económicos y materiales necesarios, así como la urgente actualización de un marco normativo eficaz y riguroso capaz de establecer unas reglas de juego para todos, que ponga fin al intrusismo, la competencia desleal y la piratería de la economía sumergida, que asfixia a las empresas turísticas, y que provoca un impacto negativo en los destinos y la creciente turismofobia de la ciudadanía.
En efecto, como consecuencia de la falta de iniciativa y permisividad del conjunto de las administraciones, cuando no como resultado de la insuficiencia de los recursos destinados a la ordenación del turismo, se está produciendo la expansión de las viviendas turísticas sin control, la actividad de los guías free y sus tours de alcohol, la nefasta imagen del botellón y los lateros, la proliferación del comercio 24 horas y la amenaza de las barras de degustación, las excursiones piratas sin ningún tipo de cobertura, y el descontrol de las licencias VTC, que degradan la calidad de los servicios turísticos y la imagen de Madrid como destino.
Todo ello en un entorno, de creciente de asimetría normativa y de incremento de la presión administrativa sobre sectores como las agencias de viajes, con la permanente revisión de sus avales y garantías, la aparición de normativas fallidas como la que regula el turismo activo como actividad deportiva, y el estancamiento en el pasado de la normativa reguladora de los campings, la hostelería, el ocio y los espectáculos.
Se trata de un panorama complejo que requiere un abordaje integral y multidisciplinar, pero que cuenta con el compromiso de los agentes económicos y sociales que con su participación en la jornada de hoy, pretenden trasladar a la Administracion su capacidad y voluntad de colaboración por abordar con garantías la asignatura pendiente de la regulación de la actividad turística en Madrid.